Cesen de amoldarse a este sistema de cosas (Rom. 12:2).
A Pablo le preocupaba que al parecer las filosofías y los razonamientos dañinos del mundo de Satanás habían influido en algunos cristianos (Efes. 4:17-19). Esto puede sucedernos a cualquiera de nosotros. Satanás, el dios de este sistema de cosas, utiliza diversos métodos en un esfuerzo desesperado por alejarnos de Jehová. Uno de ellos es explotar cualquier deseo que tengamos de satisfacer ambiciones egoístas o de ser alguien en el mundo. Incluso puede recurrir a nuestros antecedentes, cultura o educación para hacernos pensar como él quiere. ¿Podemos arrancar de nuestra mente cosas que están “fuertemente atrincheradas”? (2 Cor. 10:4). Veamos la respuesta de Pablo: “Estamos derrumbando razonamientos y toda cosa encumbrada que se levanta contra el conocimiento de Dios; y ponemos bajo cautiverio todo pensamiento para hacerlo obediente al Cristo” (2 Cor. 10:5). En efecto, con la ayuda de Jehová podemos controlar los razonamientos erróneos. w19.06 8 párrs. 1-3
A Pablo le preocupaba que al parecer las filosofías y los razonamientos dañinos del mundo de Satanás habían influido en algunos cristianos (Efes. 4:17-19). Esto puede sucedernos a cualquiera de nosotros. Satanás, el dios de este sistema de cosas, utiliza diversos métodos en un esfuerzo desesperado por alejarnos de Jehová. Uno de ellos es explotar cualquier deseo que tengamos de satisfacer ambiciones egoístas o de ser alguien en el mundo. Incluso puede recurrir a nuestros antecedentes, cultura o educación para hacernos pensar como él quiere. ¿Podemos arrancar de nuestra mente cosas que están “fuertemente atrincheradas”? (2 Cor. 10:4). Veamos la respuesta de Pablo: “Estamos derrumbando razonamientos y toda cosa encumbrada que se levanta contra el conocimiento de Dios; y ponemos bajo cautiverio todo pensamiento para hacerlo obediente al Cristo” (2 Cor. 10:5). En efecto, con la ayuda de Jehová podemos controlar los razonamientos erróneos. w19.06 8 párrs. 1-3
Cesen de amoldarse a este sistema de cosas (Rom. 12:2).
A Pablo le preocupaba que al parecer las filosofías y los razonamientos dañinos del mundo de Satanás habían influido en algunos cristianos (Efes. 4:17-19). Esto puede sucedernos a cualquiera de nosotros. Satanás, el dios de este sistema de cosas, utiliza diversos métodos en un esfuerzo desesperado por alejarnos de Jehová. Uno de ellos es explotar cualquier deseo que tengamos de satisfacer ambiciones egoístas o de ser alguien en el mundo. Incluso puede recurrir a nuestros antecedentes, cultura o educación para hacernos pensar como él quiere. ¿Podemos arrancar de nuestra mente cosas que están “fuertemente atrincheradas”? (2 Cor. 10:4). Veamos la respuesta de Pablo: “Estamos derrumbando razonamientos y toda cosa encumbrada que se levanta contra el conocimiento de Dios; y ponemos bajo cautiverio todo pensamiento para hacerlo obediente al Cristo” (2 Cor. 10:5). En efecto, con la ayuda de Jehová podemos controlar los razonamientos erróneos. w19.06 8 párrs. 1-3
