Cómo defenderse
Los espíritus malvados tienen poderes sobrehumanos, pero podemos oponernos a ellos y vencerlos con la ayuda de Dios (1 Pedro 5:9). Para obtener dicha ayuda, debemos aprender los requisitos divinos y cumplirlos. Respecto a los cristianos de su día, el apóstol Pablo escribió: “No hemos cesado de orar por ustedes y de pedir que se les llene del conocimiento exacto de su voluntad en toda sabiduría y comprensión espiritual, para que anden de una manera digna de Jehová a fin de que le agraden plenamente” (Colosenses 1:9, 10).
Entre quienes obtuvieron ese “conocimiento exacto” hubo varias personas de la ciudad de Éfeso que practicaban artes mágicas. Veamos cómo influyó en ellos aprender la verdad. La Biblia relata: “Buen número de los que habían practicado artes mágicas juntaron sus libros y los quemaron delante de todos”. Por cierto, el valor de aquellos libros era de “cincuenta mil piezas de plata”, lo que desde luego no era poca cosa (Hechos 19:17-19). Aquel ejemplo de valentía quedó registrado para nuestro provecho (2 Timoteo 3:16).
Los espíritus malvados tienen poderes sobrehumanos, pero podemos oponernos a ellos y vencerlos con la ayuda de Dios (1 Pedro 5:9). Para obtener dicha ayuda, debemos aprender los requisitos divinos y cumplirlos. Respecto a los cristianos de su día, el apóstol Pablo escribió: “No hemos cesado de orar por ustedes y de pedir que se les llene del conocimiento exacto de su voluntad en toda sabiduría y comprensión espiritual, para que anden de una manera digna de Jehová a fin de que le agraden plenamente” (Colosenses 1:9, 10).
Entre quienes obtuvieron ese “conocimiento exacto” hubo varias personas de la ciudad de Éfeso que practicaban artes mágicas. Veamos cómo influyó en ellos aprender la verdad. La Biblia relata: “Buen número de los que habían practicado artes mágicas juntaron sus libros y los quemaron delante de todos”. Por cierto, el valor de aquellos libros era de “cincuenta mil piezas de plata”, lo que desde luego no era poca cosa (Hechos 19:17-19). Aquel ejemplo de valentía quedó registrado para nuestro provecho (2 Timoteo 3:16).
Cómo defenderse
Los espíritus malvados tienen poderes sobrehumanos, pero podemos oponernos a ellos y vencerlos con la ayuda de Dios (1 Pedro 5:9). Para obtener dicha ayuda, debemos aprender los requisitos divinos y cumplirlos. Respecto a los cristianos de su día, el apóstol Pablo escribió: “No hemos cesado de orar por ustedes y de pedir que se les llene del conocimiento exacto de su voluntad en toda sabiduría y comprensión espiritual, para que anden de una manera digna de Jehová a fin de que le agraden plenamente” (Colosenses 1:9, 10).
Entre quienes obtuvieron ese “conocimiento exacto” hubo varias personas de la ciudad de Éfeso que practicaban artes mágicas. Veamos cómo influyó en ellos aprender la verdad. La Biblia relata: “Buen número de los que habían practicado artes mágicas juntaron sus libros y los quemaron delante de todos”. Por cierto, el valor de aquellos libros era de “cincuenta mil piezas de plata”, lo que desde luego no era poca cosa (Hechos 19:17-19). Aquel ejemplo de valentía quedó registrado para nuestro provecho (2 Timoteo 3:16).

