Aquellos que pueden obtener un trabajo en la profesión elegida aún pueden encontrar que su vida no ha resultado como esperaban. Después de regresar de la universidad en el Reino Unido, Niran, que es de Tailandia, encontró un trabajo en su campo. “Como esperaba, el título me ayudó a conseguir un trabajo con un salario más alto. Sin embargo, el salario más alto me exigió más trabajo y más tiempo. Finalmente, la empresa despidió a la mayoría de sus empleados, incluyéndome a mí. Me di cuenta de que no hay seguridad en ningún trabajo ”.

Incluso aquellos que son ricos o han logrado la llamada buena vida todavía enfrentan problemas familiares, tragedias de salud e incertidumbre económica. Katsutoshi, de Japón, admite: "Disfruté de muchas cosas materiales, pero estaba frustrado por la competencia, los celos y el acoso". Lam, una mujer que vive en Vietnam, dice: “Veo que muchas personas luchan por un trabajo bien remunerado para obtener seguridad financiera, pero en realidad tiene el efecto contrario: inseguridad, trastornos de salud, agotamiento emocional y depresión. "